
BUSCAR LA EXCELENCIA
Buscar la excelencia es querer ser los mejores, porque deseamos ser los que:
Mejor hagan las cosas, los que más cuiden
los detalles.
Más valoremos la comunicación amable y amistosa.
Más reconozcamos la importancia
del éxito y de la prosperidad.
Más importancia demos a cada una de las personas.
Más generemos
y apoyemos la creatividad y la innovación.
Brindemos el servicio de más alta calidad.
"La
mejor idea del mundo esta condenada a fallecer
a
menos de que caiga en manos de un grupo de campeones
que
esté dispuesto a defenderla a cualquier precio"



RESPONSABILIDAD ES LA HABILIDAD DE
RESPONDER
.
De acuerdo a la filosofía de la mejora continua, garantizar la calidad significa
tener la suficiente madurez para establecer un compromiso con la verdad y hacernos responsables.
Responsabilidad
es la habilidad de responder conscientemente
con todo: pensamiento, palabra, obra y emoción. Garantizar la calidad no significa que los que practican esta disciplina
sean perfectos, ni invulnerables al error, ya que, como sabemos, “errar es humano”.
Para garantizar la calidad no basta con tener
un nombramiento, ocupar un puesto o tener un diploma en la pared: lo primero es hacer un compromiso mutuo e interdependiente,
un compromiso consciente y genuino con la
verdad y la responsabilidad; lo segundo es tener el conocimiento de que el error existe, de que se puede presentar en cualquier
momento y de que todos nos podemos equivocar.
Cuando se presente la no conformidad del cliente, debemos estar
preparados para revisar las evidencias sin descalificar a los involucrados, discernir las causas aparentes de las reales y,
en consecuencia, implantar medidas preventivas que eviten
que el problema se repita, o se transforme en un conflicto. Por lo que la utilización de un formato como el que presentamos
a continuación resulta de gran utilidad.
La solución de cualquier problema exige organizarnos de manera más eficiente
y legítima. La no conformidad –incluyendo la duda–, se puede presentar en cualquier momento, en todos y
cada uno de los procesos a partir de diversas fuentes,
incluyendo por supuesto las quejas y observaciones de médicos, pacientes, familiares, colegas, proveedores y autoridades,
además de las inconformidades que se detectan en las auditorías internas y externas.
Es fundamental que reconozcamos que en toda
relación humana, incluyendo las personales, familiares, sociales y de negocios, el éxito depende en gran medida
de la confianza, y ésta a su vez de la buena comunicación, de la inteligencia, la tolerancia y la buena voluntad. Cuando no existe congruencia entre lo que se piensa,
se dice, se siente y se hace, se genera incertidumbre, y cuando alguien muestra tales contradicciones, nos hace pensar que
en vez de estar ante una persona consciente, madura y comprometida,
nos encontramos ante un individuo confuso, por lo que al perderse la confianza, la relación finalmente se deteriora
y está condenada a terminar de manera irreversible.
En todos los sistemas es fundamental que exista congruencia y coherencia.
Congruencia entre lo que se dice y lo que se hace. Coherencia significa permanecer firme a lo largo del tiempo a pesar de
las vicisitudes, la adversidad, los fracasos y los temores. Tenemos que darnos cuenta de que lo único permanente es el
cambio. Las situaciones cambian continua e inevitablemente a lo largo de nuestras vidas, por lo que también los sistemas
y las personas cambian con el tiempo. Lo importante en estas condiciones es que seamos conscientes de la realidad y que nos
percatemos que los cambios pueden ser positivos si aprendemos a usarlos en beneficio de la evolución, dejando atrás
todo lo falso, por muy difícil que nos resulte, para acercarnos más a lo genuino, que finalmente es lo
único que prevalece.
